¿Qué son los residuos peligrosos?
Los residuos peligrosos se refieren a residuos industriales o urbanos que debido a su toxicidad y peligrosidad deben ser tratados con métodos extremadamente seguros. Por supuesto, no deben desecharse en vertederos. Dichos tipos de residuos incluyen los que contienen fosfuros, isocianatos, metales alcalinos y ácidos, que forman gases durante la combustión (por ejemplo, el cloro forma cloruro de hidrógeno, HCl). También incluyen los que contienen mercurio, etc.
Una solución específica para eliminar residuos peligrosos
Debido a que este tipo de residuo se considera peligroso, debe ser tratado térmicamente a una temperatura muy elevada (1
100 ° C) durante dos segundos en una cámara de combustión con un contenido mínimo de oxígeno. Esto asegura una oxidación y destrucción completas.
Para llevar a cabo este proceso, en Tecam solemos utilizar hornos rotativos o estáticos, según el tipo de residuo a tratar. Los hornos rotativos se utilizan con mayor frecuencia, ya que están diseñados para tratar una amplia variedad de residuos sólidos.
Pirólisis controlada
La pirólisis controlada o gasificación es el proceso mediante el cual la materia orgánica se oxida parcialmente. Se regula el contenido de oxígeno, añadiendo una cantidad inferior a la estequiométrica para poder controlar el proceso de combustión. La temperatura de funcionamiento de la pirólisis controlada suele ser superior a la de la pirólisis normal (750°C). Esto es debido a que se produce una oxidación parcial, que genera energía y aumenta la temperatura dentro del horno.
Este proceso también genera gas de síntesis, que es una mezcla de monóxido de carbono, hidrógeno, dióxido de carbono, agua y nitrógeno. Además, genera residuos sólidos y materiales inertes no combustibles como metales pesados.
¿Dónde se aplica la tecnología de pirólisis y cuáles son sus ventajas?
Estos sistemas se utilizan para el tratamiento de residuos urbanos, plásticos y lodos de depuradora.
Representan la primera fase del proceso de combustión y están destinados a lograr la gasificación (es decir, extraer los compuestos volátiles de los desechos) para que sea más fácil oxidar los residuos en la cámara de oxidación secundaria.
Además, dado que este proceso genera gas de síntesis, puede utilizarse para producir energía y/o reutilizarse en otros procesos.
¿En qué consisten los equipos de pirólisis?
Los sistemas de pirólisis constan de los siguientes elementos:
– Pretratamiento: puede consistir en secado u otras medidas preparatorias.
– Ram feeder: se trata de una serie de válvulas que permiten controlar la alimentación de los residuos. El objetivo principal de este dispositivo es permitir la entrada de residuos y evitar que entre aire al horno desde el exterior.
– Horno rotativo o estático: este horno tiene un cuerpo cilíndrico, posicionado horizontalmente, que gira sobre su propio eje, permitiendo la descomposición de los residuos sólidos en su interior.
– Ventilador de entrada de aire: controla la cantidad de oxígeno. Por lo general, opera sobre la base del 30% de la cantidad estequiométrica, es decir, solo se agrega la cantidad estequiométrica de oxígeno necesaria para oxidar el 30% de los residuos.
– Extracción de cenizas y carbono fijo: el material de desecho contiene una cierta cantidad de compuestos que no se pueden gasificar y, como resultado, generan cenizas y carbono fijo (carbonilla). Los hornos deben estar equipados con un dispositivo para extraer estos materiales de desecho, enfriarlos y enviarlos para su posterior tratamiento.
En Tecam somos especialistas en la valorización de residuos mediante procesos de pirólisis o incineración, para los sectores más sensibles al impacto medioambiental.
Si está interesado en obtener más detalles sobre este tema o sobre las soluciones de tecnología medioambiental de Tecam para el tratamiento de emisiones y la valorización de residuos, póngase en contacto con nosotros; estaremos encantados de ayudarle: +34 93 428 11 54 o info@tecamgroup.com
